Tres monos

Artículo publicado en El Comercio, enlace aquí

Sigue la obra redentora de la economía asturiana que nos va a poner a exportar ‘como burros’. Ahora, con Rajoy desde Madrid acusando de mangoneo, nos encontramos con el Partido Popular asturiano realizando peticiones públicas de investigación, mientras cursa de manera errónea el procedimiento; y posteriormente observamos a Izquierda Unida diciendo que «no es el momento». No se preocupen, cuando toque escenificar el alejamiento pre-elecciones, sacarán el tema. Ya se sabe, así se mide la idoneidad y el interés general. Les deseo suerte tratando de explicarlo a su electorado.

Lo mejor viene cuando alguien intenta criticar sobre la adecuada ejecución de la obra. Se pasa a ser un despreciable «rechazador de inversiones». La postura oficial es que aquí se ha gastado dinero público en obra civil siempre de manera acertada: una autovía minera y un campus de Mieres precioso lo aseguran, los agujeros del metrotrén, edificios inteligentes, hospitales fronterizos medio vacíos, futuras construcciones de justicia… ¿Para qué controlar? Confiemos y que paguen la factura nuestros hijos. Porque hay factura, en este mundo no se regala nada. Ni siquiera la financiación europea.
¿Saben lo más difícil de creer de esta comunidad? No es que el principal partido de la oposición no se sepa el reglamento de la Junta. No es que IU ‘asista al palo’ como partido progubernamental para unas cosas incomprensibles, y luego, en lo serio, se salga del consenso económico. No es que el PSOE se haya convertido en una mera burocracia corporativa. No es que los sindicatos vayan a lo suyo en defensa de los trabajadores privilegiados, mientras camino de cinco millones de parados, algunas familias subsisten con ayudas de miseria. (¿Es ésta la famosa emancipación de la izquierda?)

Lo más difícil de creer es que parece no importar a nadie. Que, acostumbrados a las mentiras, nos vamos deslizando por una pendiente, hacia una sociedad sin referentes, que en tiempos de crisis, además de deprimente, es peligrosa.

Edito: Si hay siguiente, prometo empezar a ser más constructivo. La gripe me ha puesto excesivamente pesimista. La referencia a los tres monos creo que no quedó clara, son los de «oir, ver y callar».

Elecciones alemanas por Jesús M. Hevia Riopedre

25 de septiembre, viernes. Quedan dos días para las elecciones y ya me he hecho a la idea de que Alemania bailará al son del CDU y del FDP durante los próximos cuatro años. La gran incógnita es saber qué tipo de música será la que suene.

La prensa europea está tan espectante como yo por ver cómo le sienta a Alemania este más que inminente giro a la “derecha”. Por lo que a mí respecta, hablar de derechas y de izquierdas se ha convertido en un anacronismo; si no difícilmente se podría explicar que sea el Partido Popular y no el PSOE quien se oponga a las injustas y discriminatorias concesiones a las Naciones Históricas españolas (según los jacobinos, todos los ciudadanos del país deberían tener los mismos derechos y obligaciones). Aparte de este ejemplo, muchas de las cartas que se barajan en la política actual no se dejan someter a este maniqueísmo: energías renovables, guerras en Oriente Medio, centrales nucleares, etc.
A mi juicio, tiene más sentido hablar de gobiernos intervencionistas y de gobiernos liberales. La coalición que hasta el traspaso de poderes habrá gobernado a Alemania, formada por socialistas y cristianodemócratas, se caracterizó por seguir aplicando y reformando el intervencionismo estatal en material económica que ha hecho de Alemania uno de los países modélicos en cuanto a prestaciones sociales. Y cabe recordar, por mucho que les pese a los liberales, que debido a (o a pesar de) este intervencionismo Alemania ha pasado de ser polvo y cenizas a convertirse en el tercer producto interior bruto del mundo.

Todo apunta a que el CDU habrá de elegir si seguir con la coalición actual o sustituir al socio socialista por uno liberal. Es decir, que nadie sabe todavía si Alemania seguirá en la línea intervencionista que le ha caracterizado o si se arriesgará a introducir un poco de liberalismo económico al más puro estilo anglosajón. El CDU es un partido tradicional, conservador, no debería haber razón para cambiar lo establecido. Pero quién sabe si el CDU preferirá venderle el alma a un pequeño diablo que cree poder controlar antes que compartirla con un SPD grande y fuerte. Ésta es la única incógnita de deparan las elecciones germanas.

Dudas

Artículo publicado en El Comercio, sobre energía, enlace aquí

Parece que la inversión privada, en esta economía capturadora de subvenciones públicas que es Asturias, genera consenso. Ahora bien, más allá de la importante obra, ¿qué beneficios a largo plazo ofrece una regasificadora? Pues puede que nulos.

Quemar gas natural para producir electricidad parece un error a corregir. Tras la llegada de las renovables, existen dos caminos principales en la energía de respaldo, o el abundante carbón con su CO2, o la nuclear con sus residuos. Quemar gas natural es irresponsable ¿Por qué? Lejos de los estilizados y carísimos modelos eléctricos de los salones del coche europeos, la realidad (y no parece que en las próximas décadas esto vaya a cambiar) es que el mundo (el primero, el tercero y el del medio) se mueve al son de los motores de combustión interna, cuya única alternativa, en un escenario de escasez severa de petróleo, es el gas. El biodiesel, que deforesta o explota tierras agrícolas con salarios de subsistencia para cebar nuestros coches, en fin, traspasa lo moral. El gas natural, ligado al precio del crudo, que en un futuro sufrirá las mismas apreturas de oferta, y que no reduce nuestra dependencia energética exterior, está de moda.

Y lo está porque en este país hay un tabú enorme respecto a la energía nuclear. A calzón quitado ¡Hay que apoyar a la energía nuclear! Hay que apoyar una energía que, gracias las posibilidades del almacenamiento moderno y la reutilización de residuos, es segura, limpia y barata. Que, con una menor contaminación en nuestras ciudades, mejoraría nuestra competitividad exterior y crearía empleo, reduciría nuestra dependencia de países en conflicto y aseguraría el futuro de las renovables ¿Políticamente incorrecto? Quizás, pero para decir que Asturias va bien ya está la oposición.

Edito: La primera parte de este artículo bebe, plagia, o recoge conclusiones directamente de este post de Kantor de los Lorem Ipsum. El cual, espero, no se sienta molesto. Entre que soy un aficionado diletante en el tema de energía y que los 1800 caracteres con espacios de la prensa no dejan hueco para muchos matices, necesitaba una punto de vista con el que de manera intuitiva me encontrase de acuerdo. Mi recomendación es que os leáis el post entero, con su debate en los comentarios, y que de paso, si todavía no lo conocéis, os deis un paseo por el estupendo Club Lorem Ipsum.

Rieles mojados

Artículo publicado en El Comercio sobre la comisión de investigación del Superpuerto que ha pedido el PP, enlace aquí

EL PP, tarde (como siempre), cuando el común de los asturianos percibía, relacionado con su silencio, que no podían oponerse (ya saben ustedes, actuar de oposición), se descuelga con una comisión de investigación ¡Sorpresa! Sólo necesita 8 diputados para iniciarla y tiene 20. Si algún grupo se resiste, la votación se lleva al pleno donde habrá que ‘retratarse’.

De IU, con 4 diputados (llave para tantas y tantas cosas), por militancia, simpatizantes y futura supervivencia, nadie comprendería una posición contraria a la comisión. A ojos de su votante sería asumir como propia la gestión (y los errores) del superpuerto y terminaría de avivar el ‘follón’ interno, por el cual suenan tambores de guerra cainitas, entre la facción más progubernamental y el resto. Si la votación se produce, atentos al Sr. Valledor.

El PSOE, con 21 diputados, puede presionar a su socio en el gobierno para que vote en contra o puede intentar que los letrados de la mesa de la cámara no admitan a trámite, por invasión de competencias, la comisión. Pero la habilitación en el reglamento de la Junta a que las comisiones traten «cualquier asunto de interés público» en Asturias y tras las declaraciones de Blanco en el Parlamento nacional, donde hace expresa renuncia a la competencia de su ministerio o del Gobierno de España en la obra, parece imposible no aceptarla. Pero de algunos guardagujas jurídicos públicos de esta comunidad se puede esperar cualquier cosa.

Esperemos que unos por otros no descarrilen el último tren de la democracia asturiana, esperemos que se encuentren las explicaciones que los asturianos exigen, esperemos que, en este momento crítico para una política deteriorada, en esa institución tan necesitada de respeto, algunos diputados recuerden para quien trabajan.

Subidas de tipos en el horizonte (por M. Sarachaga)

Lo siento, pero no es que me guste especialmente ser agorero, pero he nacido así. Si se confirma la recuperación de las principales economías europeas, el BCE se verá obligado a endurecer su política monetaria para eludir la inflación. La subida de tipos y el recorte de facilidades de crédito por parte del banco central nos pillará todavía tratando de levantarnos y será una losa para familias y empresas (sin olvidar las repercusiones sobre el servicio de la deuda pública) que se añadirá a la mayor presión fiscal:

«Europe’s economies are rebounding at different speeds, complicating the European Central Bank’s efforts to put the region back on a more stable footing.

Even as the global economy recovers and Germany and France return to growth, the European Commission yesterday cut its forecasts for Spain and Italy. Deutsche Bank AG says some of the economies that were once motors of growth and job creation across the 16-nation bloc may stay mired in recession next year

Vivir en campaña (los trileros y otros manidos tópicos sobre la crisis)

Artículo para el blog de las Jornadas de Debate que se celebrarán en Llanes el 11, 12 y 13 de septiembre en Llanes sobre «La Crisis Económica. Causas y soluciones» a las que asisto como moderador de la mesa del primer día.

Sin ningún empacho, los mismos ejecutivos y cargos gubernamentales han pasado, en unos meses, de cantar alabanzas a las bajadas de impuestos y a la disciplina fiscal, a pretender el sostenimiento de la demanda mediante el gasto público, en una curva ideológica verdaderamente sorprendente. Maravillas de estos tiempos modernos, dignos herederos de Chaplin. Todo ello, mientras facultades de económicas y escuelas de empresariales renuevan sus temarios, con el objeto de que teoría y realidad no diverjan en exceso.

Dice la maldición “Ojala vivas tiempos interesantes…” y estos lo son, en lo político y en lo económico. Lo desesperanzador surge cuando, con nuestras limitadas herramientas intelectuales, asistimos al espectáculo que nos ofrece quien nos gobierna. Responsables de enviar sorprendentes mensajes a la sociedad, no ya a favor o en contra de una u otra escuela económica, si no de ruptura con los consensos más básicos del sentido común y del interés general.

Así, las conclusiones más recientes de la prensa europea donde se pretende dar por zanjada la crisis en este mes de septiembre, causarían sonrojo si no fuesen responsables gubernamentales quienes se encuentran detrás de esta manipulación (en 2008). Otras mentiras comunicaciones y medidas más autóctonas: como la tan nombrada devolución de los 400 euros, el cambio de 150 euros en la cesta de la compra por productos españoles, la fallida política de “campeones nacionales de energía”, el pretendido aterrizaje suave de los precios de la vivienda; o las mas recientes: de la ausencia del debate nuclear en torno al modelo energético, de las estériles polémicas sobre el gasto sanitario, de la ausencia de una necesaria modificación en la regulación del mercado laboral, de la pretendida reforma fiscal que día a día se transforma a golpe de titular, o la diseñada ayuda de los 420 euros a los parados de larga duración en un entorno de absoluta improvisación (Ahora ya no se si es universal o no). Tal falta de planificación es preocupante y ofensiva. Esa percepción generalizada de que España se gobierna a golpe de estudio de opinión debería hacernos reflexionar sobre quien y como se guía el destino económico/político de este país.

Hoy, con un trilero por Presidente que miente sin empacho (en 2008, en 2008, en mayo, en agosto, en septiembre), con unas cifras alarmantes y al alza de desempleo y un descenso del PIB anual del 4,2%. Hoy, cuando la OCDE confirma la pésima situación comparativa de España frente a los países de nuestro entorno y su evidente salida más tardía de esta crisis. Hoy, cuando la recaudación pública se encuentra bajo mínimos y el consumo y la inversión privados se muestran totalmente paralizados. Hoy, nuestra Ministra de Economía se permite el lujo de alentar el optimismo y aventurar que el despegue español se producirá en el segundo trimestre de 2010, cuando hace un año se trasmitió a la población que se empezaría a salir de la crisis a partir de la segunda mitad del 2009.

Hoy, con un sistema financiero sostenido por las mentiras de los balances de las entidades, la realidad tozuda es que somos un país que va a sufrir una crisis larga y dramática, en la que muchos analistas ven a España como el ejemplo peor preparado para afrontarla. En la que serán necesarios sacrificios y dolorosos cambios, individuales y colectivos.

Nuestro gobierno no debería permanecer ajeno a la imperiosa necesidad de trasmitir esta realidad a la sociedad. Al seguir utilizando las mismas herramientas “balsámicas”, vendiendo a la población una falsa tranquilidad, el mensaje transmitido de que la crisis se solucionará sola, como un mero problema temporal y pasajero, que no hace necesario un ejercicio de autocrítica, es dañino y perjudicial para los ciudadanos en su toma de decisiones.

Empresas, sí, pero también: administración pública, sindicatos y trabajadores. Políticos y ciudadanos, todos consentidores, hemos sido culpables de este desastre. Todos tendremos que evaluar nuestro papel y deberemos tomar una posición activa si queremos participar en la recuperación. Si queremos salir de esta crisis, no como la mala caricatura de un país egoísta e indolente, sino con el retrato de una España capaz de sacrificarse y ser mejor.

Creo que esa es la parte más importante de esta crisis, darle voz y escuchar a quienes han demostrado ser dueños de un discurso propio e independiente. Quienes pueden aportar propuestas con valor, desde su experiencia, alejados de las ocurrencias electoralistas de aquellos conservadores de izquierdas y derechas cuya mayor inquietud es no ser movidos por los tiempos. Crisis como estas deben provocar debates: el del déficit exterior, el del modelo energético, el del gasto sanitario, el del papel de la administración pública, la reforma laboral o incluso el del modelo de estado, para tratar de confrontar argumentos, con el objetivo de que hoy, en este momento crítico de cambios e inestabilidad, entre aquellos que se preocupan por el futuro de este país, puedan surgir las ideas sobre las que construir una sociedad mejor.

Informe de Competitividad, España pierde 4 puestos

Y la gente preocupada con lo del puño.

«Spain has dropped four ranks this year to reach 33rd place. Spain’s competitiveness performance continues to be boosted by the large market (13th) available to its national companies, strong technological adoption (29th in the technological readiness pillar), first-class infrastructure (22nd), and good-quality higher education and training (33rd). On a more negative note, its institutional environment (49th) could be strengthened to further buttress its economic potential. In addition, there has been a measurable weakening of the country’s macroeconomic stability since last year, dropping from 30th to 62nd place, with the government now running budget deficits and contributing to the already large debt burden. And the greatest area of concern remains the highly inflexible labor market (122nd), which discourages job creation, a matter of particular concern given the recently rising unemployment in the country—at 19 percent, it is the highest in the euro zone. It is especially interesting to note that the Spanish financial sector pillar has fallen 14 positions to rank 50th.This is interesting because Spain’s financial sector was praised by world leaders during the 2008 G-20 summit, right before the construction companies went bankrupt as a result of the explosion of the housing bubble, causing a sizeable hole in the balance sheets of its main financial institutions

Xavier Sala i Martin, exponiendo los puntos principales del informe. (Youtube – inglés)

Y un resumen en Español, que empieza con una mención a ¡España y su pérdida de puestos! (Youtube – español)

Y el informe por si quereis descargarlo

indice competitividad 0809_01

Lunes… empieza fuerte la semana

Al hilo de la presentación de cuentas trimestral de CCM, McCoy se descuelga con un análisis que causa desasosiego por las implicaciones para nuestro «sano y robusto» sistema financiero español.

«Pues nos cuentan, ni más ni menos, que la morosidad de la entidad ha pasado de diciembre del año pasado a junio de este año del 9,32% al 17,33%; es decir, que prácticamente ha doblado en seis meses. Que uno de cada tres créditos a promotores están en mora tras pasar en el mismo periodo del 16,77% al 31,36%; que una quinta parte de su financiación empresarial está incursa en la misma situación (del 11,27% al 20,94%), que los activos dudosos sin garantía real se han multiplicado por cuatro en 120 días (3,47% al 13,86%) y que la mora de las hipotecas sigue por debajo del 3% (del 1,5% al 3%) lo que permite que la cifra final no sea aún más escandalosa. La tasa de cobertura se encuentra ligeramente por debajo del 30%.»

Y no me resisto a poner a Miguel Sebastian, Ministro de Industria, explicándonos de manera brillante el porqué de muchas de sus decisiones.

«Yo siempre decía a mis alumnos que en un incendio el bombero nunca mira el contador de agua.»

Genio y figura.